¡hola!
Me voy a estrenar en este espacio de cocinillas con una receta que espero os guste: Pastel de carne en hojaldre.
La receta la saqué de una web, y cuando la leí, me dije: ¡Qué coñ. … digo: ¡qué diablos! XD ¡Voy a meterme en la cocina, a leer la receta, a improvisar, a dejar perdida la encimera, fogones y suelo, y a rezar para que salga algo comestible! Sí, con el paso de vivir con padres a vivir sólo, me convertí en atrevido con la cocina, me gusta experimentar y ver qué pasa, total, si está malo siempre estamos a tiempo de desempaquetar unas salchichas y meterlas al microondas. En fin, que me pierdo. Como la primera vez y sucesivas no me ha quedado del todo mal, o al menos eso dice Amaterasu y otros amigos que se comieron el pastel a guisa de conejillos de indias, os pongo aquí cómo la hice, y si os apetece poneros un día y experimentar, seguro que os gustará y repetiréis.
¡Vamos allá!
Ingredientes
- 300 gramos de carne de ternera picada.
- 150 gramos de masa de hojaldre.
- 150 gramos de champiñones.
- 2 cebollas.
- 30 gramos de Maicena.
- caldo de carne.
- Harina.
- Una yema de huevo.
- Pimienta negra molida.
- Perejil picado.
Preparación
Antes que nada, lo del hojaldre merece una explicación a parte. Yo he comprado las láminas de hojaldre del Mercadona, esas que vienen congeladas, pero siempre me ha pasado una cosa curiosa: cuando se descongelan, normalmente las láminas se quedan algo pegadas, y cuesta dios y ayuda despegarlas, así que si alguien compra el hojaldre así y sabe cómo despegarlas bien, que deje un comentario jejeje. En la lista de ingredientes, aparecen 150 gramos de hojaldre. Yo al final acabo, o usando dos láminas de hojaldre de las que vienen congeladas, o amasándolas a mano. Por experiencia, os recomiendo que uséis dos láminas (una como base y otra para taparlo todo), en lugar de usar una sóla y doblarla para tapar el pastel, pues siempre será más sencillo recortar los bordes si sobra, que quedarnos cortos y que nos quede un pastel con forma de chorizo de cantimpalo. Y otra vez, me voy por las ramas. ¡Vamos con los pasos de preparación!
- Cortad las dos cebollas en trocitos pequeños y pochadlas de una de estas dos formas:
- Rehogándolas en una sartén con poco aceite hasta que se pongan blanditas y transparentes. Lo de transparentes, como a mí no me vale, lo que hago es esperar a que se pongan blanditas, tocándolas con una pala de madera (la que uso para moverlas mientras se rehogan), y se suele notar bien. Si no, con mucho cuidado, podéis sacar unos trocitos de la sartén con la misma pala, soplar para no abrasaros, y tocar para ver cómo va quedando.
- Utilizad el Lékué, un estuche de silicona para cocinar al microondas. Poned la cebolla con un chorrito de aceite dentro del Lékué, removedla bien para que empape en el aceite, y metedla al microondas a la máxima potencia unos cuatro minutos. Siempre podéis sacarla y tocarla con mucho cuidado para ver si ya está en su punto.
Una vez blanditas, espolvoread por encima una cucharadita de perejil.
- Cortad los champiñones en lámina si los comprásteis enteros. Si es el caso, Recordad lavarlos bien y quitarles la arenilla.
- Poned en un plato los 30 gramos de maicena, la harina, una pizca de pimienta negra molida y un toque de sal. Esto al gusto del consumidor.
- Amasad la carne picada como si fuérais a hacer hamburguesas pequeñitas, y pasadlas por el plato con la harina, la maicena y demás hasta que quede consistente.
- Id poniendo la carne ya enharinada sobre el hojaldre, hasta cubrirlo todo menos los bordes. Dejad en los bordes un par de centímetros para luego poder unir la lámina de la base con la superior y poder apretarlas bien, para que no se nos desmonte el invento al trasladarlo a la bandeja o al cocinarse. Esto lo digo por experiencia propia .
- Sobre la carne, colocad las láminas de los champiñones y la cebolla. Si queréis, podéis mezclar las láminas de carne con los champiñones y la cebolla haciendo capas sucesivas para que quede todo más homogéneo. Lo importante es que no se os desmonte todo y los ingredientes se salgan de la lámina y se esparzan por la encimera, que luego es una guarrada limpiarlo todo.
- Ahora, regad la mezcla con caldo de carne para que tenga más sabor. En la receta original, dice que se le eche un cuarto de litro de caldo (lo que viene siendo un vaso), pero la vez que lo intenté, se produjo una inundación en la encimera, y acabé con goterones de caldo hasta en los zapatos. Así que ahora soy más comedido. Id regando suavemente la mezcla hasta que veáis que el pastel no admite más líquido.
- Coged la segunda lámina de hojaldre, colocadla encima del pastel, y apretad los bordes para cerrarlo completamente. Más vale que esté bien cerrado y quede mucho borde o muy grueso, a que se nos abra en el horno y al sacarlo se nos salga todo el relleno (experiencia propia, otra vez).
- Con mucho cuidado, trasladad el pastel hasta la bandeja del horno.
- Ahora este paso es una moñada, pero a mí me hace sentir todo un cocinero profesional. Coged un huevo, abridlo en un plato, retirad la clara, coged la yema, ponedla encima del pastel, y esparcidla con suavidad por toda la lámina superior del hojaldre. Cuando lo saquéis del horno, ¡veréis qué brillito y qué tacto más lisito y pofesional queda!.
- Haced un pequeño agujerito en el centro del pastel, para que escape el vapor al cocinarse.
- Calentad el horno a unos 180 Cº, colocad la bandeja en su interior, y dejad cocinar durante 40 minutos aproximadamente.
¡Y esto es todo! Se admiten sugerencias y cambios para mejorar el pastel. ¡Ya diréis en los comentarios si os habéis atrevido a probarlo y qué tal os salió!
2 respuestas a Pastel de carne en hojaldre